Acaba de llegar a mis manos. Recién salido del horno de la imprenta, calentito como el pan recién hecho. Es fino y verde entre mis manos. Sabe a sueño recién cumplido. Y sabe a poco. Porque los sueños una vez cumplidos hacen que desees más...
Nada más sacarlos de la caja. Dos ejemplares. Uno para mi madre y otro para mí.
Ya ni versos escribo, sólo queda este soñar de lágrimas teñido, y una queja distante en el olvido azul lejano de tu voz de seda. Amor no es, es algo que remeda la desmembranza del rosal caído, donde ya ni las sombras hacen nido, ni el viento en rondas de cristal enreda. Algo que ayer fue lirio de mi fuente, frescura de mi noche, y suavemente luminar en mi senda florecida. Algo que en mi agonía aún retengo, porque es la única verdad que tengo y no puedo arrancarla de mi vida.
"Te echan a perder; tu madre y tu padre. Quizá no sea su intención, pero lo hacen. Te transmiten todas sus carencias... y crean algunas más en ti, tuyas en exclusiva.” Philip Larkin
Es pelirrojo, tiene los ojos de un azul hipnótico, frente ancha, rasgos regulares; es alto y delgado con hombros anchos; tiene una mirada intensa que te traspasa, y todo su ser transmite fuerza interior, caracter y seguridad. Igual que sus gestos y sus andares...
Se llama Michael, de madre irlandesa y nacido en Alemania. Y es un gran actor, por supuesto. Cuya novia actual, por cierto, se llama como yo y acaba de ganar un óscar por "La chica danesa".
Llevo varios años enamorada de Michael Fassbender, desde que le vi en "Shame".
Luego indagué en su biografía y busqué todas las películas y series de TV de su filmografía para absorverlas por los ojos.
Así vi "Centurión".
Y "Jane Eyre":
Y su breve aparición en "Malditos Bastardos":
Y en "Fish tank":
Y vi su dramática transformación en "Hunger", donde adelgazó quince kilos:
Y por supuesto le vi como Magneto en X-Men:
Y buscando, buscando, le vi en "Angel":
En "300":
En la serie de TV "Hex" donde hace de demonio, y qué demonio, yo al menos le seguiría hasta el mismísimo infierno:
Y en el biopic "Frank", escondido tras una máscara:
Y en "Eden Lake":
Y como robot en "Prometheus":
Y como tirano esclavista en "12 años de esclavitud":
Y le vi en el western "Slow West":
Y en "Macbeth":
Y en "Steve Jobs":
Y se me olvidará alguna, pero porque apenas aparece o porque tampoco quiero aburriros. Yo no me aburro de subir fotos suyas, of course... (¿Cómo puede haber hecho tantos trabajos con solo 39 años?)
El caso es que cuando vi que aparte de ser guapo, este actor camaleónico y polifacético era además un gran actor, no pude evitar enamorarme, con ese amor que solo destinamos a los seres inalcanzables.
Y luego le descubrí en las entrevistas, riendo a carcajadas:
O haciendo el tonto:
O un streap-tease... ;)
Y no puedo resistirme a poneros un gif con una sonrisa suya, amplia y franca, él que suele salir tan serio y atormentado en casi todas sus interpretaciones:
Hacía casi un año que no visitaba a mi madre en el pueblo. Y lo primero que vi al entrar en el patio, fue una auténtica selva amazónica... de cardos.
Que las imágenes hablen por sí solas.
Hay cardos grandes:
Más altos que yo. Cardos pequeños:
Y cardos que empiezan a brotar:
Incluso tienen flores:
Rodeadas de espinas...
Pero lo que más me sorprendió, fue que en medio de esta selva de cardos, habían crecido a duras penas otras plantitas.
Como estas con flores moradas.
O estas margaritas:
En grupos numerosos:
Incluso un ramillete de espigas de trigo:
Estuve entretenida sacando fotos mientras fumaba. Observando cómo la naturaleza se abre paso cuando nada se lo impide. Si se la dejara, los cardos entrarían en la casa y colonizarían habitación por habitación. Cuando mi madre ya no esté, tal vez lo hagan.
Llamaron a mi puerta, y por temor a las sombras
y a los lobos hambrientos, no respondí. ¿Fue el hu-
racán, el amor o la muerte? ¡Quién sabe! ¡Tal vez!
Más tarde tuve encendida mi lumbre y servido mi
vino. Nadie llamó. Los búhos silbaban en mis ven-
tanas.
Y ahora que las sombras me rondan, en vano digo:
regresa, peregrino; caliéntate a mi lumbre y be-
be de mi vino. Nadie responde...
Fuera, en el sendero, un grillo deshila una can-
ción sedienta...rueda una hoja seca.
Dentro, se apaga la lumbre y se derrama el vino. Emma Posada
Según nos explican en esta página sobre ciencia, anoche hubo una mini-luna, es decir, se vio la luna más pequeña de todo el año, en contraposición de la super-luna, que es la más grande. ¿El motivo? Pues que estaba mucho más lejos de nuestro planeta.
Sin embargo, a simple vista, yo no hubiera podido jurar que era más pequeña. La luna llena seguía siendo tan bella como siempre cuando volvía a mi casa de madrugada después de meses de encierro casi forzoso. Esta miniluna me sacó de la crisálida de mi hogar para desplegar unas pequeñas alas y comenzar a volar por el cielo de Madrid. Y encima conocí a buena gente, cosa que no ocurre todos los días. Y en la noche de las letras, en el cuarto centenario de la muerte de Cervantes, otros seres humanos y yo nos dedicamos a la literatura, a hablar de escribir y relatar. Actividad rara y poco convencional donde las haya... Entre caña y caña y finalizando con una cena india en una terraza.
Lo curioso es que hoy no me encuentro tan agotada como debería estar. Me siento bien. Con mucho sueño, pero bien. Debe ser por la luna. Sea mini o no...